¿En qué consiste la tecnología de calibración del vidrio filtrante Bioma Active Filter Glass y cuáles son sus ventajas?

Vamos a imaginar que tenemos un recipiente lleno de pelotas de golf. A través de estas hacemos pasar un fluido (agua) que tiene partículas sólidas en suspensión. Las pelotas van a actuar como un medio filtrante y no dejaran pasar las partículas sólidas que sean más grandes que los espacios libres. 

Si a este filtro de pelotas de golf le añadimos otro producto de menor tamaño, supongamos que le añadimos una buena cantidad de lentejas, estas lentejas irán a ocupar los huecos entres las pelotitas y los huecos serán más pequeños. Si hacemos pasar agua por este filtro, ahora la filtración será muchísimo más efectiva.

A este filtro se le podría añadir algún otro elemento más fino que las lentejas y se conseguiría un filtro de gran rendimiento para nuestra piscina.

El problema que conlleva este modelo es que si no tenemos en cuenta la cantidad de partículas de cada tamaño que conforman la masa del vidrio filtrante, al final, con el continuo movimiento del material dentro del filtro debido al propio proceso de filtración y a los contralavados, los diferentes granos de material se van segregando y clasificando por tamaños formando acumulaciones de grano grueso que no filtran y de grano fino que se compactan. Esto es lo que sucede con la gran mayoría de los medios filtrantes de vidrio reciclado y, en todos los casos, cuando trabajamos con arena de sílice. 

La tecnología de calibración MC2^® del vidrio filtrante BIOMA Active Filter Glass, desarrollada y patentada en el laboratorio de I+D de Camacho Recycling, consiste precisamente en el desarrollo de un modelo de clasificación granulométrica que permita, por un lado, la creación de los micro canales, entre partículas, del menor tamaño posible, con lo que conseguiremos la mejor calidad de filtración y, por otro lado, evite la segregación de las partículas más finas y mantenga por tiempo indefinido la homogeneidad del producto.

Este es el motivo de que solo el vidrio filtrante BIOMA Active Filter Glass consiga un nivel de filtración de 1 micra en condiciones óptimas a baja velocidad, y de menos de 10 micras en condiciones de filtración de piscina privada, donde la velocidad alcanza los 50 m3·h·m2.

Y este es también el motivo de que el vidrio filtrante BIOMA Active Filter Glass no se segregue nunca y mantenga su rendimiento de filtración de forma indefinida. Por eso este producto dura para siempre y los demás, no. 

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